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Para preparar una losa de hormigón Primero, nuestro grupo de hierreros levanta con acero la estructura de las columnas; a estas, nuestro grupo de carpinteros las encofran (con cajas con madera). Finalmente, nuestro grupo de maestros civiles las funden vertiendo hormigón en ellas; este elemento de soporte vertical es indispensable para soporta la losa (el piso).
Segundo, se realiza la estructura para soportar la losa.
Para la estructura, primero encoframos las vigas (elemento estructural horizontal que amarra las columnas), estas se encuentran descolgadas de la losa tal como Nuestro código de la Construcción lo indica. Este encofrado se realiza con elementos metálicos verticales (puntales), que soportan vigas metálicas horizontales donde se colocan estructuras de madera que posteriormente soportaran la losa de hormigón.
Tercero, nuestro grupo de hierreros comienzan a armar las vigas con varillas de acero en distintas direcciones para amarrar las columnas. Los carpinteros, por su lado, colocan maderas en los laterales de las vigas; y los plomeros y Maestros de obra civil les siguen colocando pasos circulares en puntos estratégicos de la viga para permitir el paso de futuras instalaciones como tubería de incendios, tubería de desagües, tubería de agua, cables eléctricos, electrónicos etc.
Cuarto, los carpinteros completan toda la estructura de madera horizontal y los hierreros tienden nervios que van de viga a viga para formar una malla entrelazada de varillas dejando huecos de 50x50cm donde los maestros de obra civil colocan alivianamientos (Cajas de espumaflex de 50x50 o estructuras metálicas de tronco cónico con base cuadrada). Esto permite un diseño estructural más eficiente y liviano. Finalmente, entran los distintos grupos de eléctricos y plomeros, electrónicos, arquitectos a verificar la estructura y a completar las instalaciones de toma corrientes, desagües, pasos etc. Quinto.
El día de la fundición Desde muy temprano llega el hormigón, se arma desde Planta Baja hasta el piso que se está fundiendo una sola tubería por donde sube el hormigón. Este tiene altas resistencias entre 240 y 300 kg/cm3. Se vacía este material sobre los alivianamientos y las vigas; luego se usan vibradores para que el hormigón se reparta uniformemente y no deje vacíos. Le siguen los maestros nivelando el piso dándole caídas donde se necesite. Los plomeros están verificando que los niveles se mantengan perfectos y los hierreros se preparan para el siguiente día.
Para finalizar la losa, entra en un proceso de alisado y el día siguiente de curado, que consiste en humedecer el hormigón por varios días para que éste gane resistencia y no se vea afectado por el sol de nuestra ciudad. El siguiente día de la fundición de la losa se vuelve a armar columnas y se las funde. Con esto comienza el mismo ciclo.